Según Robinson (2010) " es la habilidad de ver muchas posibles respuestas a una pregunta, muchas formas de interpretar una pregunta, de ver múltiples respuestas y no solo una".
En este sentido, la creatividad juega un papel importante dentro de este paradigma ya que viene siendo un componente esencial del mismo, es decir, se necesita tener una buena creatividad para pensar de manera diferente a lo común o para tener diversas formas para responder a una cuestión. En general, el paradigma divergente es la capacidad de ver montones de respuestas posibles a un problema, montones de maneras diferentes de interpretar una cuestión, es pensar lateralmente, no solo de manera lineal o convergente.
De acuerdo a lo planteado anteriormente, se puede decir que el sentido opuesto de la evaluación hoy en día, es la innovación, lo que se quiere es tratar de cambiar la forma tediosa de evaluar, buscar la manera de que los exámenes tipo test no sean tan básicos, desarrollar al máximo la creatividad de los Docentes para que el alumno no se sienta presionado a la hora de una evaluación, sino al contrario que la misma permita explorar cada una de las capacidades y habilidades que poseen los mismos.“La educación ahoga y margina el talento" Robinson siempre ha sido defensor de la idea de que las escuelas matan la creatividad. Por eso, Robinson aboga por la necesidad de que cambie el actual paradigma educativo: es necesario que la educación evolucione para que dentro de ella cada persona desarrolle sus propias capacidades, encuentre sus propias salidas y genere sus propias soluciones. Este será uno de los ejes que harán revolucionar la educación del siglo XXI y que tenemos a manos, como docentes, gracias a las tecnologías".
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